Ciclo 2: Hidratar y humectar.
En este lavado nos centraremos en reparar el pelo.
En el próximo lavado, sin importar cuántos días hayan pasado, ser recomienda utilizar productos fortalecedores y reparadores. Este tipo de fórmulas (normalmente en formato mascarilla) restauran los enlaces de hidrógeno y reponen la proteína, reparando los folículos pilosos dañados.
La clave va a estar en las mascarilla que tendrá como objetivo reponer las proteínas para regenerar los folículos y las fibras dañadas. Este paso es el más importante, sobre todo para aquellas personas que tengan el pelo teñido o que usen muchas herramientas de calor.